A letter from Dec 18, 2024

Querido yo del futuro, Ha sido un año difícil, pero te escribo esta carta para compararlo con el próximo año y dejar algunas metas para ver si se cumplieron. Actualmente, mis recursos son muy limitados: tengo 30.50 MN y 1/4 de dólar. Estoy endeudado con el carro, Coppel, Emmanuel y más de 100,000 MN al banco. La semana pasada se me ponchó la llanta y todavía estoy usando la de repuesto. También me quedé fuera de la casa y tuve que romper la chapa y hasta tuve que pelearme con una rata. Para colmo, Arturo, Diana y mi hermano dejaron de hablarme. Javier se va a casar, y ni siquiera me invitó. Vendí mi laptop, mi 3DS y mi Switch para conseguir algo de dinero. No recibí el aumento en el trabajo a pesar de mi esfuerzo. Quiero renunciar, pero siento que mi falta de inglés me está frenando. En cuanto a mi salud, no me he hecho el estudio del corazón ni de la tiroides que necesito, y tampoco puedo comprar las medicinas de Vanessa. No he podido quitarle la muela, ni tampoco sus brackets. Todo esto me hace sentir que estoy fallando en muchas cosas, pero hay algo en lo que estoy seguro de que no fallo: ser papá. Mi hijo es feliz, y eso me da fuerzas. Hablando de familia, mi padre tiene una bola en la mano que no se ha tratado, y espero que esté bien. En mi caso, mi espalda y mi cabeza no dejan de doler, pero me aguanto porque Vanessa también se siente mal. Nuestra casa es un desafío diario. No tengo dinero para mudarnos, y vivir ahí es complicado: el ruido es insoportable, las goteras son constantes, se llena de hongo, y todo parece estar mal. Sin embargo, hay pequeños rayos de esperanza. Ayer comencé a hacer ejercicio, y la próxima semana me tomaré dos semanas de vacaciones. Vanessa me dijo que me regalarían unos lentes nuevos, ya que los míos se rompieron y no había podido reemplazarlos. Metas para el próximo año: Aprender inglés para abrir nuevas oportunidades. Mejorar mi salud y hacerme los estudios necesarios. Salir de las deudas más críticas. Conseguir un lugar mejor para vivir. Seguir siendo el mejor papá posible para mi hijo. Espero que cuando leas esta carta, las cosas hayan mejorado. Si no, sigue luchando. Recuerda que sobreviviste a este momento tan complicado, y si pudiste con esto, podrás con cualquier cosa. Con cariño y esperanza, Tu yo del presente