A letter from Aug 04, 2024

Dear FutureMe, No se como expresarme, ni porque estoy aquí. Tengo el terrible presentimiento que esta carta no llegaré a leerla nunca, pero he aquí mis motivos (con la esperanza de escribir esto de la forma más poética posible, y quien sabe, que termine siendo tan célebre como los escritos de Anna Frank o aquella carta de Kafka enviada a su padre). No pretendo escribir 40 páginas, pues redundaría en lo mismo, y eso lo he escrito mucho ya. No se dobde debería empezar, pues siempre es diferente el inicio. Odio mucho cuando culpan la ausencia de la figura paterna con los problemas que llegan a tener los hijos, pero aunque quiera refutarlo, yo los tengo. Aunque obviamente no creo que sea por eso. Ahora debería abarcar el tema de mi relación con mi madre. Al no tener (nunca) alguien más en quien apoyarme, la mayor parte del tiempo intente tener una buena relación con ella. Pero no lo logre. No lo estoy logrando. Me estoy haciendo daño. Una simple vestisca desata una huracán, y es lo mismo. Por eso estoy escribiendo esto aquí ahora, por que no tengo ni idea de que hacer. Arreglar las cosas y disculparse, he perdido la cuenta de cuentas veces lo he hecho, para siempre terminar igual. Y ahora nos vamos a otro tema: las pastillas. ¿De qué otra manera podría acabar con todo? El año pasado, en navidad tomé un poco, pero no acabo bien porque no las tome como sobredosis, sino de poco en poco. Y sigo vivo, lastimosamente. Hace un par de meses lo volví a intentar. Me llené la boca de paracetamol y acabe vomitándolo todo. Esto es lo mejor y lo más cobarde que puedo hacer. Pretendo arreglar problemas de los demás cuando yo mismo no puedo con mi mierda. Me hecho tantas responsabilidades cuando tengo aun que intentar luchar por seguir vivo. Tengo que escoger que seguir y que hacer con mi vida, que desiciones tomar, con quien relacionarme. Todo eso para nada. Es por eso, que aunque siempre mi desición sea indecisa, he tomado (nuevamente) de intentarlo nuevamente. Hoy, volví a pegarme. No lo hacía desde el incidente del amigo secreto. Me estiré tanto la cara que ahora me duele el labio. Y cuando me abofeteé, mi madre se preocupó más porque los vecinos nos veían que por como me estaba muriendo por dentro. No estoy bien, y (me parece) nunca lo he estado. No debería culpar a nadie más que a mi mismo, porque a pesar de todo sigue siendo mi culpa. ¿Y que puedo hacer, mejor sino es acabar conmigo? Les estaría haciendo un favor, les quitaría un peso de encima. Recuerdo con algo de ironía, como hace nomá un mes pensaba que "La metamorfósis" era un escrito ridículo. Siempre he sido un Gregor Samsa. Aunque no lo quieran admitir, mi muerte sería lo mas benéfico para todos. No gastos inútiles, no gasto en la universidad, no más comida para mi. Soy como mantener un perro, y creeme, mi familia ya se deshizo una vez de una mascota mía. Nunca podré ser el niño de mamá.