A letter from December 21st, 2014

¡Hola, Adrián! Soy yo, Adrián. Sí, tú a los 18 años de edad. Te escribo ésto una noche del 21 de diciembre del 2014, o por lo menos eso dice la computadora, aunque quizás se pueda decir que es diciembre 20, pues acaba de cambiar la fecha, es decir, son las 12:56 a.m. de 21 de diciembre, pero para fines prácticos, dejémoslo en que es la 1:00 a.m. A decir verdad, éste día no hice nada, ¿recuerdas por qué? ¡porque fuimos a una guardia en el Hospital Universitario! A una guardia de cirguía el viernes 19 de diciembre de 2014 de 8:00 p.m. a 8 a.m. del sábado 20 de diciembre. Saliste a las 8:15 aproximadamente de una cirugía y después te fuiste a dormir a tu casa. ¿Medio de transporte? Te fuiste en metro. Hacía frío y quería empezar a llover, entonces te pusiste tu suéter Aeropostale azul marino y te subiste al metro. Había mucha gente, pero en la estación Cuautémoc se bajó mucha gente, entonces aprovechaste para sentarte e ir platicando por medio de Whatsapp con tu amiga y compañera Saraí Villareal sobre lo que hiciste en la guardia de cirugía. Llegaste a la estación Exposición, donde tenías que tomar el transmetro para ir a tu casa. Llegaste a la línea para esperar al transmetro y fuiste ''suertudo'' porque quedaste hasta adelante, así que teníamos un lugar seguro para sentarnos, pues no aguantábamos los pies después de estar más de 12 horas de pie. En el transmetro tomamos lugar y nos estábamos quedando dormidos intensamente, hasta que llegamos a la estación donde nos teníamos que bajar. (*Nota: No sé (en el presente que es pasado) si hablar de nosotros o de ti en el pasado. No hay problema, lo usaré de forma combinada*) Te bajaste y estaba lloviznando. ¡Por fin llegamos a nuestra casa! El dolor de piernas y pies era insoportable. Subiste a tu recámara para acomodar las cosas que estaban sobre tu cama y poder dormir, pero antes de eso te metiste a bañar, preparaste una sopa Ramen de res y pusiste un episodio de The Vampire Diaries en la computadora, pero la conectaste a la televisión con un cable HDMI. Te acabaste la sopa y te pusiste a ver la serie, la cual no terminaste de ver porque te quedaste dormido desde las 11:00 a.m. ¡hasta las 9:40 p.m. más o menos! (Nota rápida: Estoy hablando con Sahira Zúñiga por Facebook, pero ya se va a dormir). Nos levantamos y el teléfono estaba sonando: Era tu madre, aparentemente preocupada porque no supo nada de nosotros en todo el día (pues estabas dormido). Dijo que pidiéramos una hamburguesa de los ''Weros'', y así lo hicimos. Terminamos de ver el episodio de The Vampire Diaries, vimos un episodio de la mini-serie de La Biblia y aquí estabas, escribiendo una carta para el futuro. ¿Qué pasó antes y durante la guarda? Uh, fue hermoso... Algo así. En la mañana del viernes te despertaste a las 11:00 a.m. en casa de tus abuelos, que el Adrián de 18 años espera que estén vivos cuando estés leyendo ésta carta. El día anterior (jueves) habías quedado con tu primo Mauricio para ir a tomar unas fotos de moda a su amiga Paulina Zúñiga en la casa de su tía (tenía una casa preciosa y muy lujosa). Al terminar la sesión fuimos a Costco para comprar una pizza italiana que estaba deliciosa. Después fuimos a casa de abuchela y ahí te vestiste con tu pitufo gris para la guardia. Abuchela, tía Maricela y Mauricio iban a ir a ver a tu prima Alisa bailar ballet a lo que parecía que era ''El Cascanueces''. Antes de eso te fueron a dejar a la estación ''Felix U. Gómez''. Te bajaste en la estación ''Hospital'' y al llegar a urgencias le hablaste al Dr. David Fernández , para reportarnos. Dijo que estaba en el cuarto piso del hospital. No lo encontraste, pero en su lugar encontraste a un amigo: ''Omar Levi'', que estaba contigo en la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey, donde estudiabas piano. Sólo lo saludaste, porque estabas buscando al doctor, pero para sorpresa, lo encontraste de nuevo, junto con el doctor en el primer piso, en urgencias, donde también descubriste que formaría parte de tu guardia de cirugía. Había 3 médicos de cirugía en guardia, los doctores: David Fernández, Quetzalli y Roberto, con quien entraste a cirugía. ¿Te digo la verdad? ¡No hiciste absolutamente nada por lo que fueron más o menos 3 horas! Aparentemente iba a ser una noche llena de acción, pero eso no fue lo que sucedió. Hubo algo MUY importante, pero no fue la ''noche de acción''. Fuiste a cenar con tu amigo Omar (al que habías eliminado de Facebook porque te arruinó el segundo libro de ''The Maze Runner''. Él te ayudó a pagar la cena (guisado de chicharrón, frijoles, guacamole y agua de horchata. Lo que hiciste esa noche fue llevar a un paciente con VIH (espero que para cuando estés leyendo ésto ya hayan encontrado una cura, aunque aparentemente estamos a punto de encontrarla en el 2015) y que lo había mordido un perro. Para bajar al paciente a que le hicieran un ultra-sonido pasaste una vergüenza porque Omar y tú no sabían cómo pasarlo a la silla de ruedas, no cómo desconectarlo, ni cómo bajar la camilla ni nada, perecían un par de estúpidos. Ah, y una señora te preguntó por qué a su familiar le temblaba el brazo. No supiste por qué, y le dijiste que llamarías a un doctor, y sí, lo hiciste, pero al parecer nadie subió a verlo. ¡Por fin lograron llevar al paciente a su estudio! Pierna normal, pero región maleolar y dorsolateral del pie edematizados sin colecciones. Lo siguiente de la guardia fue esperar a que subieran a un paciente que iban a amputar a cirugía, pero antes de eso éste mismo paciente estaba discutiendo con el cirujano Roberto porque él no quería que le amputaran tanto, pues sólo tenía necrosado el primer ortejo del pie derecho, pero el doctor le dijo que si no se la cortaban al mismo nivel de su otra pierna amputada, iba a batallar más, porque de todas formas no le iba a ser funcional, la recuperación iba a ser más larga y no sé qué otras cosas más. El paciente se disculpó con el doctor. Morías de ternura por aquél paciente :'( Después de horas de espera por fin lo subieron (lo subiste) a pre-operatorio (fue ahí donde esperaste horas). Entraste a quirófano para que prepararan al paciente. Lo anestesiaron y cuando entró el doctor y vio la pierna de nuevo, dudó sobre cortarla tanto, revascularizarla o no sé. Eso fue lo que después a mí me causo conflicto emocional, porque a lo mejor no era necesario cortarla tanto, pero bueno, eso lo sabré si acaso en unos días (cuando le haya preguntado al doctor el por qué de su decisión) o dentro de algunos años, cuando sepa qué rollo... Cuando sepas qué rollo. Me lavé. Oh, Dios... Fue el sentimiento más genial que había tenido desde mi existencia en el planeta Tierra. Me sentía todo un profesional. Me enguanté y comenzó la operación. El doctor me dio un bisturí ¡para cortar la pierna! Corté la piel, la grasa, las fascias, los músculos, las venas y arterias, ¡todo! comenzó a salir mucha sangre y la limpiaba con compresas. Corté la arteria femoral y wow... La tuve que presionar con mucha fuerza, pues sangraba demasiado. El doctor se pasó a mi lado para pinzarla y después ligarlas. Le ayudé a ligar algunas, pero después una compañera de ojos verdes lo ayudó a eso mientras yo sostenía la pierna. Creo que aunque no haya escrito ésta carta, nunca se te olvidaría ese momento, ese primer paciente, esa primera amputación. Ayudaste a cortar el hueso, sosteniendo una dona de metal mientras el doctor la cortaba con un hilo-sierra. El doctor limó el hueso y le puso cera para huesos. Empezó a coser por dentro la pierna y a cauterizar las arterias. Cuando estaba cerrando hubo un momento donde te dijo que lo ayudaras a suturar. Tú no lo podías creer. ¡Ibas a suturar la pierna de un paciente! ''Ve lo que hago yo, y hazlo tú'', te dijo el doctor. Hice unos 5 puntos, ¿cómo ves? Y al parecer sólo uno me falló. Ahora sé hacer puntos para muñón. La cirugía fue todo un éxito (me acabo de agarrar los ojos con chile de la hamburguesa) y el paciente dijo: ''Gracias, muchas gracias''. Eso me pudo demasiado y me quedé pensativo durante todo el día, por lo menos lo que estuve despierto. No sé el nombre del paciente, pero pienso preguntárselo al doctor y cuando lo sepa te mando otra carta. Si no la recibes, probablemente se me olvidó, pero ni modo, ya sabrás si la vas a recibir o no. Fue un día muy emocionante, la verdad. Estoy teniendo una crisis existencial, que supongo que también la tendrás tú dentro de unos 15 ó 20 años. No sé qué vayas a estar haciendo, pero espero que tu vida vaya desarrollándose con éxito. Prometo que te ayudaré a hacer eso mientras trabajo en el pasado. Sí, reprobé fisiología, pero no volverá a suceder. Saldré adelante y subiré mis calificaciones. ¡Vamos a ser exitosos! Bueno, otra cosa que también espero para el futuro es que no alcances a leer ésta carta, sino que quiero que Jesús venga antes por nosotros. Espero que la puedas leer de alguna forma, pero cuando ya estemos en el cielo. No estoy bautizado, pero también trabajo en eso. ¡Feliz navidad! Que sea con quien sea que la estés pasando, estés feliz... Muy feliz. La vida es una locura, pero es una locura muy bella. Un regalo especial de nuestro SEÑOR. ¡No la desperdicies! Que hay paz en tu corazón y que confíes en Dios, no te dejes llevar por las dificultades que puedas estar pasando, y en su lugar, por en primer lugar a Dios y pide por su ayuda. Eras un joven muy raro, la verdad. Te apasiona escribir, te encanta leer, amas las noches lluviosas (como hoy), te encanta ver películas, te encanta soñar... Espero que no hayas cambiado. Recuerda quién eres y a dónde vas. Espero que seas un gran médico :) La noche del 20 de diciembre (21) fue una noche de paz. Tus papás están en una posada y tus hermanos en casa de tus abuelos Papi Víctor y Malía. ¡Te mando una foto! Adiós, Adrián de 18 :) ¡Diviértete! Wow, ya son las 2:04 a.m.